48. Visual Board. (Panel de inspiración, mapa mental, vision board, esquema vital, cartel de visualización, etc…)
Te prometí un poderoso recurso que te va a enfocar a alcanzar tus sueños, objetivos, deseos y metas.
Hoy te lo traigo, confiando en que lo vas a poner en práctica, para no quedarte atrás.
Y, además, va a ser súper divertido hacerlo.
Como no puede ser de otra manera, viniendo de mi mano, va a ser muy creativo, y lo vas a crear tú. Sí, Tú.
Pero, antes, déjame que te cuente algunas cositas:
47. Enfócate en lo que quieres.
Hoy me despido de ti.
Y, por eso, (y porque le he puesto mucha dedicación) este artículo va a ser más largo de lo habitual y no lleva música.
Pero antes quiero disculparme por algo de lo que me he dado cuenta:
Leo muy deprisa.
Tal vez por ello también quiero vivir deprisa y bien, jjj ; y, por ello, aprendo mucho y aplico lo que aprendo en mi vida, para mejorarla.
Sin embargo, para lo que a ti te importa, me he dado cuenta de que mis vídeos van muy rápidos (menos mal que solo he creado dos), y de otra cosa más: la música que acompaña los artículos, que yo tan cuidadosamente selecciono para hacerla coincidir con los párrafos, con las frases, siguiendo el ritmo de la música y la lectura… puede que tú lo leas de muy diferente forma y no logre transmitírtelo como yo lo concibo.
También pienso que, quizás, voy demasiado deprisa y pueden escaparsete conceptos básicos e importantes.
Enfin, todo es mejorable. Sabiendo el punto de partida todo es más sencillo para mejorarlo.
Lo que me lleva a lo que quiero contarte hoy en este artículo.
Hasta ahora te he traído muchos recursos para que empieces a vivir tu vida con mayor satisfacción y, probablemente, no los has puesto en práctica; porque, tal vez, no entiendes del todo el motivo de muchas cosas que he compartido contigo.
Por mi experiencia personal (que no olvides que tampoco es fácil), sé que funcionan. Te traigo lo que ha sido útil en mi camino (y no todo lo que he aprendido). Lo comparto porque sé que, si las vas incorporando a tu vida, aunque sigas teniendo ratos malos, problemas y demás, vas a sentirte mejor. Y ese es mi objetivo.
También he eludido a propósito el enfoque espiritual propio de estos temas, porque prefiero que empieces tomando conciencia de ti mismo, de tus pensamientos, de lo que hay en tu interior (mucho por descubrir!) y de que si consigues ser un poco constante, lo dicho, vas a estar mejor.
Pero… jjjj, ¡el pero! si no lo pones en práctica… ¿de qué te sirve?
Verás:
lo que necesitamos es la experiencia de lo que vivimos.
Si no lo vivimos, si no experimentamos, si no probamos, si no cambiamos… lo que te digo siempre, te quedas donde estás.
Y yo sé que no quieres quedarte donde estás.
Hoy te traigo un último (y primer) recurso.